sábado, 13 de diciembre de 2008

Carta abierta al Gobierno de Méjico

Carta al Gobierno de Méjico por repatriar a cubanos que escapan de la Isla.

No hay que remitirse a la Conferencia que el Ex Presidente de los EEUU J. Carter dictara ante el autócrata cubano Fidel Castro y un grupo selecto de comunistas acomodados, pertinaces y serviles para entender de una vez y por todas que la justificación de que la situación político económica de Cuba es consecuencia del bloqueo económico comercial impuesto por los EEUU a la Isla es una de las mentiras más groseras que el oligarca cubano ha instalado en la mente y los corazones del oprimido pueblo cubano y los simpatizantes de su dictadura en todo el mundo.

La verdad es que, a pesar de la hostil política de las administraciones norteamericanas hacia Cuba, el mendaz dictador cubano y sus secuaces justifican con ello la opresión, el engaño y la violación de los derechos humanos al que han sometido a un pueblo durante 50 años.

Lo peor de todo este asunto es que los Gobiernos que hoy lamen las botas del sátrapa cubano conocen hartamente de las relaciones comerciales que ha mantenido la dictadura cubana con más de 100 naciones en todo el mundo antes y después del desmoronamiento de la nefasta Unión Soviética y los restos comunistas de la Europa del este. Estos gobiernos se acogen a las mentiras del tirano Castro para atacar y rechazar a los cubanos que escapan de las privaciones de la libertad y la violación permanente de los derechos humanos de las que han sido víctimas en Cuba su tierra natal.

Hoy en día el pérfido canciller cubano anda buscando entre estos lame botas a quienes apoyen las injusticias del gobierno cubano ignorando las convenciones internacionales sobre el respeto a los derechos humanos y las permanentes violaciones de estos por el lóbrego engendro de los hermanos Castro.

Está bien demostrado que la situación política económica de Cuba es por causa de la rancia maquinaria estalinista de los Castro con la participación de sus ladinos sicarios y es repugnante el apeo a los absolutistas cubanos de varios gobiernos latinoamericanos que recusan sus compromisos internacionales de denunciar las violaciones de los derechos humanos y su responsabilidad para con la representación del pueblo que los eligió democráticamente. La propia Constitución “Marxista-Leninista” de la República de Cuba es una flagrante violación a los derechos humanos.

Dar la espalda también sería una sandez como el embargo económico del gobierno de los Estados Unidos hacia Cuba. Estrechar las relaciones con Cuba, no para lisonjear hipócritamente a la obsoleta dictadura, sino para acercarse al sufrido pueblo cubano manteniendo la dignidad de conservar una coherente posición en los principios y los compromisos asumidos para con la libertad y el respeto a los derechos humanos de los pueblos oprimidos. ¡Esa sería la postura respetable de un Gobierno democrático!

Hoy el mundo conoce la Historia y en ella se irán marcados todos los adulones de la dictadura de los Castro y serán tristemente recordados como cobardes incapaces y alimañas infectas que no quisieron cumplir con la regla de oro “lo que quieres para ti, hazlo tú a los demás” y también señalándose como devotos cristianos desconocieron el pasaje en el que Jesús expresa:

«Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria.

Serán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos.

Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

Entonces dirá el Rey a los de su derecha: “Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo.
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme.”

Entonces los justos le responderán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?”

Y el Rey les dirá: “En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis.”

Entonces dirá también a los de su izquierda: “Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles.

Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me
disteis de beber; era forastero, y no me acogisteis; estaba desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis.”
Entonces dirán también éstos: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento o forastero o desnudo o enfermo o en la cárcel, y no te asistimos?”

Y él entonces les responderá: “En verdad os digo que cuanto dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también conmigo dejasteis de hacerlo.”

E irán éstos a un castigo eterno, y los justos a una vida eterna.»

Evangelio de San Mateo Capítulo 25 versículos del 30 al 46.

1 comentario:

Alain León Beruvides. dijo...

Me parece excelente tu reflexión, no las del comandante. La tuya sí es realista y justa. Te apoyo en todo y te felicito por la osadía de hacer lo que haces. Eres admirable.